Cerezas congeladas

Las cerezas congeladas son deshuesadas antes de conservarlas.

Al congelarlas permiten mantener su forma y frescura durante varios meses.

Para obtener una buena cereza para congelar es necesario que esté en un punto óptimo de la madurez. Por ello hay que recolectarlo en el tiempo justo y procesarlo a la mayor brevedad posible para que no pierda sus características y calidad. La cereza congelada nos ofrece la oportunidad de disfrutar de este exquisito manjar fuera de temporada.

La cereza congelada puede utilizarse como materia prima para elaborar otros productos como por ejemplo batidos, helados o smoothies. También puede mezclarse con yogures, en repostería o para deshidratarla.